En el arte de la pintura, el diseño gráfico, el diseño visual, la fotografía, la imprenta y en la televisión, la teoría del color es un grupo de reglas básicas en la mezcla de colores para lograr el efecto deseado combinando colores de luz o pigmento. La luz blanca se puede producir combinando el rojo, el verde y el azul, mientras que combinando pigmentos cian, magenta y amarillo se produce el color negro.
¿Sabías que el color no es más que una percepción visual? La percepción del color es algo que se produce a causa de los rayos luminosos que impresionan en los órganos visuales y que varía en función de la longitud de onda.
Es decir, dependiendo del tipo de rayo luminoso, de la intensidad y del modo en que estos son reflejados sobre los objetos vemos unos colores u otros.
Ahora bien, existen varias teorías respecto a la forma en la cual se generan los diferentes colores —y que constituyen, también, las bases sobre las cuales se trabaja con ellos—. Estas son las teorías de síntesis aditiva y la de síntesis sustractiva.
¿Qué es la teoría del color?
La teoría del color es aquella que se utiliza para explicar cómo se generan los colores que conocemos. Podemos encontrar dos teorías al respecto, estas son la de la síntesis aditiva y la de la síntesis sustractiva. Ahora bien, el motivo por el cual distinguimos los colores tiene su razón de ser debido a los rayos de luz que rechazan los objetos.
Es decir, el ojo humano capta los rebotes de luz con diferentes longitudes de onda que no son absorbidas por el objeto. Estas son las que le dan color. Si el objeto fuera invisible, en ese caso, la luz lo atravesaría por completo y no veríamos nada.
Teoría de la síntesis aditiva
La teoría de la síntesis aditiva es un modelo que explica la obtención de los colores mediante la combinación con otros. Concretamente, la teoría habla de la existencia de colores primarios que son el rojo, el verde y el azul —también conocidos como los colores RGB, abreviados del inglés— a partir de los cuales se pueden obtener el resto de los colores. Estos provienen de los rayos de luz blanca. Al ser superpuestos entre sí, generan nuevos colores. Es decir, combinando dos colores primarios obtendríamos un color secundario —o colores aditivos secundarios—. Estos son el cian, el magenta y el amarillo. La teoría demuestra, así mismo, que al combinar los tres colores primarios se obtiene el blanco, mientras que, si se combinan los tres colores secundarios, se obtiene el negro. La teoría de la síntesis aditiva es utilizada en el funcionamiento de los televisores y de los monitores. Mediante la combinación de estos colores se pueden obtener varios espacios de colores como son los colores RGB, pero también el VGA, el LAB, el CIE XYZ, etc.
Teoría de la síntesis sustractiva
La explicación de este modelo tiene que ver con la absorción de las longitudes de onda y el reflejo de otras por parte de los objetos. De esta forma, se forman los colores. Ahora bien ¿Qué ocurre exactamente? Según este modelo el color del objeto va en función de las partes del espectro electromagnético que son reflejadas por él. Para que esta teoría sea posible es necesario tres condiciones. Por un lado, es necesario que exista una fuente de luz, una muestra y un detector —que serían los ojos—. El modelo de colores CMYK (Cyan, Magenta, Yellow, Key) se explica con esta teoría. Por ejemplo, dependiendo de la cantidad de cian que apliquemos sobre un papel, podremos controlar la cantidad de rojo que se mostrará. Esta teoría es utilizada en las impresiones a color y en las fotografías a color, aunque también en el mundo de las artes plásticas o la pintura decorativa.